CLASE:2 3 Y 4 BÁSICO COMBINADO
OBJETIVO DE
APRENDIZAJE: “Extraer información explícita de textos literarios (cuento) y
reconocer utilización de mayúsculas”.
Comenzar preguntando a los estudiantes ¿Recuerdan lo que
aprendimos la clase anterior?, ¿Qué
fue lo que nos ayudó a entender mejor el cuento?
1.- Mostrar las imágenes y
hacer las siguientes preguntas, ellos responden oralmente.
¿Qué
quieren decir estas imágenes?, ¿Qué diferencia notan entre unas y otras?, ¿Han
visto situaciones como esta?, ¿Dónde?
2.- Leer la siguiente
historia a los alumnos, detenerse en cada pregunta y pedir que respondan
oralmente cada vez que se requiera.
Las historias del abuelo
Antes de leer responde: ¿Quién crees que contará la historia? ¿De
qué se tratará el cuento?
Siempre me han gustado los cuentos de mi abuelo. Mi abuelito me dijo que hacía mucho,
mucho, pero que mucho tiempo atrás, la Tierra, que es el planeta donde vivimos, tenía unos
seres llamados árboles.
- ¿árboles? -le pregunté riéndome un poco, porque el nombre me sonó gracioso, pero él se puso muy serio y se le formaron arruguitas en la frente, como cuando la abuela cambia el canal de la tele.
- Los árboles eran unos seres vivos que no hablaban. Ellos nos daban sombra para que no pasáramos calor en verano, ni nos quemara el sol, también fabricaban oxígeno para que pudiéramos respirar y vivir sanos, y sus ramas, algunos meses al año, nos daban fruta y nos la daban ¡gratis!. Su color verde decoraba nuestras calles y nuestros parques. Cuando mi abuelo llevaba un ratito contándome la historia le pregunté:
- ¿Y por qué se fueron esos seres, abuelito?
- ¿árboles? -le pregunté riéndome un poco, porque el nombre me sonó gracioso, pero él se puso muy serio y se le formaron arruguitas en la frente, como cuando la abuela cambia el canal de la tele.
- Los árboles eran unos seres vivos que no hablaban. Ellos nos daban sombra para que no pasáramos calor en verano, ni nos quemara el sol, también fabricaban oxígeno para que pudiéramos respirar y vivir sanos, y sus ramas, algunos meses al año, nos daban fruta y nos la daban ¡gratis!. Su color verde decoraba nuestras calles y nuestros parques. Cuando mi abuelo llevaba un ratito contándome la historia le pregunté:
- ¿Y por qué se fueron esos seres, abuelito?
¿Estás de acuerdo con el abuelo?
¿Por qué?
¿Qué crees que le habrá dicho el abuelo luego?
Y él me contestó:
- Pues se fueron porque nosotros hace mucho, mucho tiempo los cortábamos para hacer papel, quemábamos la casa donde vivían, que se llamaba bosque, para construir centros comerciales y edificios, y cuando quedaban ya muy poquitos y se dieron cuenta de que, aunque nos hacían muchos regalos nosotros no los queríamos, decidieron desaparecer. Me quedé con los ojos muy abiertos mirándole fijamente, ya que todos los regalos que decía mi abuelo que nos daban esos seres llamados árboles, ahora son muy caros y hay muy poco. Por ejemplo, el oxígeno lo fabrica una máquina que tenemos que llevar encima siempre y huele muy mal; la sombra no hace falta porque el sol hace ya algún tiempo, siempre está cubierto por unas nubes muy sucias y grises que nunca hacen llover, y la fruta solo la puedes comer una vez al año porque hay muy poca y dice papá que es muy cara. Los parques solo son de tierra y plantas pequeñas que pinchan y pican mucho si las tocas. - ¿Volverán algún día los árboles?
- Pues se fueron porque nosotros hace mucho, mucho tiempo los cortábamos para hacer papel, quemábamos la casa donde vivían, que se llamaba bosque, para construir centros comerciales y edificios, y cuando quedaban ya muy poquitos y se dieron cuenta de que, aunque nos hacían muchos regalos nosotros no los queríamos, decidieron desaparecer. Me quedé con los ojos muy abiertos mirándole fijamente, ya que todos los regalos que decía mi abuelo que nos daban esos seres llamados árboles, ahora son muy caros y hay muy poco. Por ejemplo, el oxígeno lo fabrica una máquina que tenemos que llevar encima siempre y huele muy mal; la sombra no hace falta porque el sol hace ya algún tiempo, siempre está cubierto por unas nubes muy sucias y grises que nunca hacen llover, y la fruta solo la puedes comer una vez al año porque hay muy poca y dice papá que es muy cara. Los parques solo son de tierra y plantas pequeñas que pinchan y pican mucho si las tocas. - ¿Volverán algún día los árboles?
¿Qué piensas sobre lo que dice el niño?
Y él me contesto:
- Ellos están esperando que nosotros, los seres humanos, dejemos de ser tan egoístas y nos demos cuenta de que todo lo que nos regala la naturaleza se puede agotar y debemos demostrarle que estamos agradecidos siempre que podamos, intentando no malgastar los recursos que nos quedan, como el agua, porque si se enfada con nosotros lo que nos queda hoy también podría irse con ellos para no volver jamás. Y a mí solo me quedó una pregunta más que hacerle a mi abuelito cuando terminó la historia tan triste que me acababa de contar:
- Abuelito, antiguamente nosotros, los seres humanos, éramos muy tontos, ¿verdad?. Y a él le dio la risa.
- Ellos están esperando que nosotros, los seres humanos, dejemos de ser tan egoístas y nos demos cuenta de que todo lo que nos regala la naturaleza se puede agotar y debemos demostrarle que estamos agradecidos siempre que podamos, intentando no malgastar los recursos que nos quedan, como el agua, porque si se enfada con nosotros lo que nos queda hoy también podría irse con ellos para no volver jamás. Y a mí solo me quedó una pregunta más que hacerle a mi abuelito cuando terminó la historia tan triste que me acababa de contar:
- Abuelito, antiguamente nosotros, los seres humanos, éramos muy tontos, ¿verdad?. Y a él le dio la risa.
¿Qué te pareció el final?, ¿Por qué?
¿Qué se podría hacer hoy para que no pase algo así en el futuro?
Una vez leída la historia, les
hacen notar que hay algunas letras en color diferente, les dicen que esa es la
letra Mayúscula y que en esta ocasión se muestran en color para
que ellos puedan identificarla.
3.- Escribir en
su cuaderno la siguiente definición:
Se usa
mayúscula al principio de un escrito. Después de punto y seguido, punto y
aparte. Cuando escribimos nombres propios (personas, países, ciudades) y los
nombres dados a animales.
4.-
Recortar y pegar en el cuaderno un texto, el que más le guste (noticia, cuento,
poema, receta) encerrando con un círculo cada mayúscula que encuentre.
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